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 Dos noticias que leí en nuestro periódico Ecos de la Costa, los días 22 y 23 del presente mes, una referente a la propuesta del senador Héctor Michel Camarena, en cuanto a la apertura de un fideicomiso para rescatar carteras vencidas en las que han caído según él, 5,400 colimenses, lo cual representa un problema para que dichos deudores puedan seguir creciendo y generando riqueza en beneficio del Estado. La otra noticia es referente a los comentarios vertidos por el señor gobernador, Jesús Silverio Cavazos Ceballos, en lo concerniente a las grandes ganancias que obtienen y han tenido los bancos en nuestro país, derivados de los altos intereses que cobran a los usuarios de los servicios financieros que ofrecen (una banca más extranjera que mexicana) y prueba de todo lo anterior lo relaciono con los resultados publicados tanto por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, como por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), los cuales quiero compartir. En marzo de este año se publicó en el reporte de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, que en los últimos cinco años, cuando los cuatro bancos más importantes del país pasaron totalmente a manos extranjeras, el sistema bancario comercial ha mantenido una estructura oligopólica en la cual BBVA-Bancomer, Banamex-Citigroup, Santander-Serfín y HSBC, concentran el 72.7 por ciento de los activos y más de tres cuartas partes de la cartera total de créditos. Además, en estas instituciones están colocados cuatro de cada cinco pesos captados por todo el sistema bancario, y en estos cuatro bancos extranjeros se concentra 78.2 por ciento de las utilidades netas. El margen financiero de intermediación de la banca en México es tan grande, que en el 2005 les dejó un ingreso de 130 mil 756.8 millones de pesos, según la CNBV, y esta cantidad fue superior a lo obtenido por la diferencia entre intereses pagados y cobrados al inicio del actual gobierno. Pero ¿qué es lo que más les deja a los bancos? Es nada menos que los altos intereses que cobran por el uso de las tarjetas de crédito, ya que el porcentaje llega a ser equivalente a 25 veces la inflación actual, lo cual ante este panorama, el presidente de la CNBV, en una entrevista que se le hizo, dijo no tener la seguridad de que si las tasas de interés y las comisiones cobradas por el uso de las tarjetas, son demasiado altas. En ese mismo orden de ideas, el señor Óscar Levín Copel, presidente de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), comentó que mucho del problema de los costos altos en el uso de las tarjetas de crédito, se debe primordialmente a la falta de competencia en la expedición de tarjetas por otros organismos (bien comerciales o de servicios que no son bancos), pues hasta la fecha el control en el uso de las tarjetas de crédito, está circunscrito al Sistema Financiero. (Los bancos). Quiero comentar ahora lo que la Comisión Económica para América Latina y el Caribe, hace referencia a que la "extranjerización de la banca" en México, iniciada en la administración pasada y profundizada en el actual gobierno, no ha beneficiado a los consumidores. En cambio, ha generado prácticas monopólicas e incluso, propiciado "colusión implícita" entre los dueños de las instituciones para fijar tarifas y comisiones por los servicios que prestan. Como hemos podido darnos cuenta, los que hacemos uso de los servicios bancarios que ofrecen la banca extranjera, después de que ha acaparado a lo que al inicio de su privatización (entre 92, 93, 94, y posterior a la crisis de este año), en nada nos hemos visto beneficiados (salvo tal vez en los créditos hipotecarios, donde las tasas de interés se ven reducidas y a porcentajes fijos a largo plazo), generando con esto un boom de compra de casas, que en un futuro mediato pudiera generar una burbuja de falta de cumplimiento, similar a lo que ha estado pasando en los EEUU, llevando a este país a padecer problemas de inflación, debilitamiento de su moneda, y llegando a pensar en una posible recesión en su economía, de lo cual, de ninguna manera estaríamos a salvo, ya que somos grandes proveedores de dicha nación. Esta misma comisión en su reporte de este miércoles pasado, hace hincapié en que la falta de competencia en el sistema bancario (también lo dijo el presidente de la Condusef), es una de las causas de que las firmas financieras que operan en el país orienten sus segmentos más productivos, como el préstamo a tarjetas de crédito, en vez de financiar la actividad industrial y agropecuaria. En México se ha perjudicado a los consumidores en beneficio de los bancos, lo expresó Marcos Ávalos Bracho, coautor del estudio de la CEPAL Competencia Bancaria en México. Actualmente es tan productivo el negocio de la Banca, que instituciones como Wal Mart, Coppel, han solicitado a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, tener un organismo financiero (servicios de banca), con el supuesto de atender a sectores que los grandes bancos no atienden, y que en cuanto obtengan dicha autorización, verán cómo se incrementan sus ganancias aún más. Se dice que con la entrada y autorización de nuevos bancos se va a generar una competencia, lo que vendría a favorecer a los usuarios, sobre todo en términos de fácil acceso a una mayor oferta de productos y servicios financieros a precios mas competitivos. Banco de México a través de uno de sus voceros, asegura que la banca comercial requiere ampliarse y sobre todo, deberá mejorar su participación en el mercado crediticio, apoyando con más fuerza a las pequeñas y medianas empresas, ya que éstas representan el 92 por ciento del total de empresas en nuestro país, y generan casi el 75 por ciento de la mano de obra. Por tanto, cuando el señor gobernador afirma que la banca es usurera, no está fuera de razón, y su proyecto de buscar una mejor regulación al cobro de las altas tasas de interés, si llegara a darse, obtendría buenos resultados desde el punto de vista social y político. En cuanto a lo que comenta el senador Michel, respecto a las carteras vencidas de muchos colimenses, viene a probar en mucho, lo que presenté en uno de mis artículos relacionados con la Cultura Financiera, de la cual somos carentes la gran masa de mexicanos, en consecuencia, debemos generar una educación financiera tanto los que estamos en el terreno de las finanzas, como las instituciones educativas, pero sobre todo debe ser una gran responsabilidad de las autoridades gubernamentales (en sus tres niveles de gobierno), el dar los pasos necesarios para ir generando programas educativos en la materia de finanzas, con lo que, evitaríamos caer en mora, porque con conocimientos financieros de los productos y servicios financieros que ofrecen las instituciones de la banca, podríamos seleccionar y tomar los que mejor convenga a nuestros intereses personales, ayudándonos a satisfacer necesidades de habitación, generación de empresas, desarrollo agropecuario y prestación de buenos servicios a la comunidad mexicana. Dr. Luis Núñez Álvarez. |
